Todos sabemos que en el mundo inmobiliario existen las dos posibilidades más comunes y más conocidas para adquirir una vivienda: comprar o alquilar.
Existe una tercera opción aún muy desconocida: el alquiler con opción a compra. Cada vez son más los inquilinos, propietarios y agentes inmobiliarios que apuestan por ella.
En los últimos meses se ha incrementado el interés por esta modalidad, ya que, debido a la estabilización de los precios de la vivienda, muchas son las personas que se interesan por alquilar para luego comprar.
En qué consiste el alquiler con opción a compra?
El alquiler con opción a compra es una modalidad con doble contrato. Es decir, en uno se estipulan todas las condiciones referentes al alquiler de una vivienda y en el otro todos los aspectos relacionados con la opción a compra.
Este tipo de opción permite al inquilino habitar una vivienda en la modalidad de arrendamiento durante un período estipulado, que normalmente son 3 años pagando la mensualidad correspondiente.
Una vez finalizado este período, el inquilino tendrá el derecho de adquirir en propiedad la vivienda por el precio que ambas partes hayan acordado al principio de la operación. A este precio se le tendrá que descontar todas las cuotas que se hayan pagado en concepto de alquiler, es decir, las mensualidades han ido a amortizar el precio final.
Además de una entrada incial del 10% del precio final que también irán a amortización del capital.
Aspectos Importantes a tener en cuenta en una operación de alquiler con opción a compra
Antes de firmar el contrato debemos tener cuidado y debemos revisar que todas las condiciones del acuerdo estén bien especificadas.
La más importante: es necesario especificar el precio final de la compraventa, el porcentaje a descontar de las cuotas del alquiler en el precio de venta, ya que, en muchas operaciones de alquiler con opción a compra, el alquiler del primer año es superior al tercero.
Del mismo modo, también es importante que los inquilinos sepan que la entrada incial no es un depósito o fianza, es decir, si finalmente el arrendatario no compra la vivienda, ese dinero no lo recuperará.
Beneficios para el inquilino del alquiler con opción a compra
Son muchos los beneficios del alquiler con opción a compra para ambas partes. Para el inquilino:
- El pago de las mensualidades no se considera dinero perdido, sinó una inversión de futuro para la adquisición de una vivienda en propiedad.
- Permitirá al inquilino ahorrar dinero para el préstamo hipotecario futuro, ya que, la inversión inicial no es tan elevada.
- Finalmente, esta modalidad permitirá al inquilino conocer la vivienda y saber si ésta será su futura vivienda habitual antes de comprarla.
Beneficios para el propietario del alquiler con opción a compra
Para el propietario, el hecho de tener su vivienda ocupada y obteniendo una rentabilidad mensual le asegura los ingresos, ya que, si el inquilino se retrasa en los pagos, éste puede perder la entrada inicial y el acceso a la opción a compra.
Por todo ello y dada la situación económica actual, cada vez son más las personas partidarias de esta opción para adquirir una vivienda en propiedad a medio plazo sin necesidad de hacer una gran inversión de inmediato y sin hipotecarse en un plazo de 3 años.